El sangrado de implantación es un ligero manchado que se puede dar alrededor de una semana después de que el óvulo haya sido fecundado por un espermatozoide, es decir, es un indicador de embarazo. Sin embargo, algo que debes saber es que no a todas las mujeres les pasa, por lo que si te sucede o no, no deberías por qué asustarte o preocuparte siempre y cuando el manchado sea ligero. A continuación te brindamos más información sobre el sangrado de implantación.

¿Qué es el sangrado de implantación?

Es un manchado vaginal que podría confundirse con el de la menstruación, sin embargo, hay ciertas características que lo diferencian, tales como:

• Es de un tono rosado muy claro.
• Tiene una duración de pocas horas o puede durar varios días, pero de manera intermitente.
• Es muy ligero, para nada abundante.

Algunos otros síntomas que vienen acompañados de este sangrado son los típicos de embarazo:

• Ausencia del periodo menstrual.
• Náuseas
• Vómito
• Mareos
• Antojos
• Cansancio
• Ganas de orinar frecuentemente.

Pero… ¿por qué se da el sangrado de implantación? La respuesta es fácil, cuando el embrión se encuentra en su proceso de implantarse en el útero de la mujer, se rompen los vasos sanguíneos del endometrio para sustituir por unos nuevos que tendrán la función de intercambiar la sangre materna a través de la placenta y el cordón umbilical.

¿Cuándo podría ser señal de alerta?

Si bien el sangrado de implantación podría confundirse con un adelanto de la menstruación ya que este manchado ocurre entre los días 21 y 24 del ciclo menstrual (tomando en cuenta uno de 28 días), es muy importante que sí estás en busca de un embarazo lleves bien calendarizado todos tus síntomas y/o presencia de alguna anomalía.

Si eres regular podrías identificarlo perfectamente, pero si eres irregular, tendrías que esperar a que se presenten algunos de los síntomas de embarazo que ya mencionamos anteriormente para una mayor seguridad. En ambos casos, lo ideal es hacer una prueba de embarazo de sangre u orina para obtener un resultado más confiable.

El sangrado de implantación podría convertirse en un indicador de riesgo si dura más de tres días, es muy abundante y recurrente. En dicha situación, debes acudir de inmediato con tu médico para que te realice un estudio y descarte cualquier factor que podría hasta llegar a ocasionar algún aborto si es que estuvieras embarazada.

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